Mi Vía Tolosana (Camino de Arlés – GR 653): Etapa 3 Marciac – Lahitte-Toupiere
Cada día que pasa mas apasionante y con cosas nuevas por el camino, en todos los aspectos.
Empezando el día con un desayuno de campetonato que nuestro querido Guille (yil) me dejó preparado en la mañana, me disponía a partir direccion Maoubourguet, andaba bien de energía, la rodilla estaba a punto, y decidía alargar 5 kms la ruta.
El 80% de la etapa para algunos que la hayan hecho o estén por hacer, si es en tiempos de sol y mucho calor, podría decirse que es la clásica etapa pesada, de asfalto terciario y pista, algo que con el sol es muy poco llevadero, pero lo mismo, lo haces caminando bajo la lluvia, o como Jerome (el hombre francés que conocí en Auch) me ha escrito en un sms en la mañana «singing in the rain»…es otra historia. Una maravilla, un camino constante entre campos de maíz (que por cierto, a ver quien me encuentra porqué tanta producción de maíz por la zona), iglesias perdidas preciosas (el tema de las iglesias es curioso en la zona, en los jardines que las rodean se encuentra el cementerio, no da ninguna sensación extraña, todo lo contrario, muy integrado), huertos de tomateras y pimientos por doquier, etc. El otro 20% por caminos de bosques, cruzando ríos por puentes improvisados, poniendo a prueba las botas al maximo con los pedazo de barrizales, un gustazo.
Todo el camino ha ido perfecto hasta el momento en que me encuentro dos flechitas de colores que me indican a un caminito muy molón, y me digo «claro, será para caminantes, y el otro trayecto para bicicletas», que guay!, jijiji, ahora me río, pero cuando me he visto en medio de un campo de maíz, con una casa al fondo de esas de peli de terror (tipo Brujas de Blair) en las que parecía que alguien me iba a hornear para pegarse el festín por la noche, no me he reido niente di niente. Muy bonito si, pero cuidado, de verdad, para quien lo lea, a las señales, caso omiso, y en caso contrario, dejaros guiar por la orientación de una brújula.
Os adjunto un par de fotos, una en la que podéis ver un punto azul (yo) y una linea azul (donde debería estar el punto azul, jaja. Otra foto, el resultado de huir como jabato en celo cuesta arriba en barrizal, con la botas llenas de barro hasta los tobillos ;-).
Otra cosa que no puedo dejar de mencionar es la vida y seguridad que me esta dando la maravillosa aplicacion «gpx viewer», fantástica de verdad, y muy fidedigna, me descargué la ruta que antes otros habían hecho en su momento, y es mi guía constante y de consulta. Los mapas y el papel estan geniales, pero so sorry, la tecnologia tambien sirve amigos mios.
Llegando a Moubourget, cuando decido avanzar esos 5 kilometrillos más, la rodilla empieza a dar la cara, entonces entro en una farmacia, y con mis palabras claves escritas (rodilla – dolor – venda – elástica) le explico a esa amable senora que si me da una rodillera, total, me saca 10, me deja entrar al WC, le pongo perdida la farmacia, y al final le digo…mmm…»no me convencen», y «disculpe las molestias», en frances por supuesto, muy cómico.
Ya acordado por email, tenía alojamiento disponible en una casa «refujio para peregrinos», recomendada por Guille y su mujer. No sabía muy bien lo que me encontraría, lo que si es que estaba en medio de la nada. Pero cual ha sido la sorpresa con todo lo que aqui me he encontrado. Conozco a Chris, marido de Kate, ambos ingleses, y los duenos de esta preciosa casa-villa en los campos de Lahitte-Toupiere. Resulta que cumplen con los componentes de una historia ideal con la que mas de uno seguro que ha soñado alguna vez en la cabeza. El es ingeniero, ella profesora de yoga y pilates, toda la vida viajando y viajando, hasta que, durante unas vacaciones por Francia se preguntan…»aqui tampoco se debe vivir muy mal, ¿no?, poco después estaban vendiendo su casa en Inglaterra, trasladando su vida aquí, y recontruyendo una casa medio en ruinas. Ella da clases de yoga casi en toda la comarca, el, se dedica a reformar la casa desde hace 14 meses, pero lo mejor, con ayuda de voluntarios, si si, atentos, que si alguien quiere pasar unos dias trabajando en las tareas de reforma con Chris, a cambio de alojamiento y manutención es mas que bienvenido, de verdad que yo hasta me lo he pensado, porque esto es un sueño, campo, tranquilidad, un huerto, sus dos crios jugando sin parar, una cocina enorme de madera maciza, en fin…de película vamos (adjunto links de la casa y de la plataforma donde se pueden realizar ese tipo de intercambios de trabajo). Textualmente de Chris:
This is Happy Coulson, where Alberto stayed in Lahitte- Toupière. You can stay here as a workaway and get involved with the work we are doing to renovate the loft and barn into a pilgrim’s rest and yoga retreat. Why not?
http://www.workaway.info/116824138814-en.html
Otra cosilla, para ver ya que el mundo es un pañuelo, me dice el amigo, «pues llevamos veraneando 3 años en la zona de Cádiz, amazing!!», evidentemente como buen prescriptor que me considero le asalté a preguntas, ¿dónde había estado veraneando?…en Rouuushe!, o lo que es lo mismo, Roche!, vamos, coña de verdad, el mundo es muuuy pequeño amigos.
www.happycoulson.com
www.workaway.info
(Creo que no salen como link para pinchar, desde el móvil aun nose)
Ahora a descansar que mañana, me toca alcanzar Anoye.
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